Dia 11 de la guerra entre Israel e Iran – Operacion Rising Lion

Análisis Actual de la Evolución de la Guerra entre Israel e Irán (Junio 2025)

Resumen Ejecutivo / Infografia (enlace)

El conflicto entre Israel e Irán ha escalado dramáticamente en junio de 2025, transitando de una prolongada guerra de poder a una confrontación militar directa. Esta intensificación se produjo tras un período de debilitamiento de las redes de representación iraníes, lo que, al parecer, creó una ventana estratégica para Israel. La operación inicial de Israel, «Operación León Ascendente», tuvo como objetivo la infraestructura nuclear y militar de Irán, buscando desmantelar sus capacidades y neutralizar su liderazgo. La respuesta de Irán incluyó el lanzamiento de cientos de misiles y drones, impactando múltiples ubicaciones en Israel. Un punto de inflexión crucial fue la intervención militar directa de Estados Unidos con la «Operación Martillo de Medianoche», que asestó golpes significativos a las instalaciones nucleares iraníes.

Las dimensiones estratégicas del conflicto abarcan el programa nuclear de Irán, la creciente importancia de la guerra cibernética y el debilitamiento de los grupos de poder iraníes. Las reacciones internacionales están profundamente divididas, con Estados Unidos y sus aliados apoyando las acciones israelíes mientras instan a la desescalada, y Rusia y China condenando la intervención estadounidense y abogando por la diplomacia. Los estados del Golfo se encuentran en alerta máxima, preocupados por la inestabilidad regional y las implicaciones económicas. El impacto global se manifiesta en el riesgo de una desestabilización regional más amplia y la volatilidad en los mercados energéticos, aunque estos últimos han mostrado una notable resiliencia ante la amenaza del Estrecho de Ormuz. Los escenarios futuros varían desde una confrontación controlada hasta un conflicto más amplio o incluso un colapso del régimen iraní, cada uno con profundas implicaciones para la seguridad y la estabilidad global.

Introducción: El Conflicto Israel-Irán en Junio de 2025

El panorama geopolítico de Oriente Medio ha experimentado una transformación fundamental en junio de 2025, con la escalada de la hostilidad entre Israel e Irán hacia una confrontación militar directa y abierta. Esta evolución representa un cambio significativo desde el conflicto de poder que ha caracterizado sus relaciones durante décadas, marcando un momento de alto riesgo con repercusiones regionales y globales.

Antecedentes de la Hostilidad y la Escalada a Conflicto Armado Directo

La relación entre Irán e Israel ha sido abiertamente hostil desde la Revolución Iraní de 1979, careciendo de lazos diplomáticos. Esta animosidad se intensificó tras la Guerra del Golfo en 1991, evolucionando hacia un conflicto de poder que ha persistido desde 1985. Varios factores han contribuido a esta escalada, incluyendo el programa nuclear de Irán, su apoyo financiero a grupos como Hezbolá, la Yihad Islámica Palestina, Hamás y los Hutíes, así como la presunta participación iraní en ataques fuera de sus fronteras.  

Si bien el conflicto de poder ha definido durante mucho tiempo su interacción, la hostilidad escaló a un conflicto armado directo en 2025. Esta confrontación directa fue precedida por un aumento de las tensiones regionales derivadas de la guerra en Gaza, que comenzó con los ataques de Hamás el 7 de octubre de 2023. Las subsiguientes campañas de Israel debilitaron significativamente a los grupos de poder iraníes como Hamás y Hezbolá, y atacaron a los Hutíes, socavando así las capacidades de disuasión de Irán y aumentando su aislamiento.  

La transición a un conflicto directo se produjo el 13 de junio de 2025, cuando Israel lanzó una «repentina andanada de ataques» contra la infraestructura nuclear y militar de Irán. Esta operación, denominada «Operación León Ascendente», tenía como objetivo desmantelar los programas nucleares y de misiles balísticos de Irán y «decapitar a su liderazgo militar».  

El paso de un conflicto de poder de larga data a un enfrentamiento militar directo entre estados es un desarrollo crítico. El debilitamiento de la red de poder de Irán, observado tras los ataques de Hamás el 7 de octubre de 2023 y las subsiguientes campañas israelíes , parece haber sido un factor facilitador crucial para la decisión de Israel de lanzar ataques directos contra territorio iraní. Esta situación sugiere que Israel percibió una ventana estratégica de oportunidad debido a la disminución de la disuasión asimétrica iraní. La degradación de las capacidades de los grupos de poder de Irán eliminó una capa significativa de disuasión que anteriormente había impedido los ataques directos israelíes en suelo iraní. Con sus principales herramientas asimétricas debilitadas, la capacidad de Irán para infligir daños de represalia a través de sus grupos de poder se redujo, lo que hizo que la acción militar directa israelí fuera una opción más viable y, al parecer, menos costosa para Israel. Esto indica un cambio fundamental en el cálculo de seguridad regional, lo que podría marcar el comienzo de una era de confrontaciones directas y de alto riesgo entre estados en Oriente Medio.  

Evolución Militar del Conflicto

La evolución militar del conflicto entre Israel e Irán en junio de 2025 se ha caracterizado por una serie de acciones directas y contundentes por parte de ambos bandos, culminando con la intervención militar de Estados Unidos.

Operación «Rising Lion» de Israel: Objetivos y Ataques Iniciales

La «Operación León Ascendente» de Israel comenzó el 13 de junio de 2025, con una ofensiva militar a gran escala dirigida a las capacidades nucleares y de misiles balísticos de Irán, con el objetivo declarado de «decapitar a su liderazgo militar». El primer ministro Netanyahu afirmó que el objetivo era eliminar la «amenaza existencial» del programa nuclear y el arsenal de misiles de Irán, y desmantelar proactivamente las capacidades militares iraníes. Subrayó la intención de llevar la guerra a territorio iraní.  

Los ataques aéreos israelíes alcanzaron docenas de objetivos militares en todo Irán, incluidas instalaciones de fabricación de misiles, la principal instalación de enriquecimiento de uranio en Natanz, talleres de centrifugadoras cerca de Teherán, laboratorios en Isfahán y el reactor de agua pesada de Arak. Los ataques también llegaron a la ciudad de Rasht, en el mar Caspio. Israel afirmó haber destruido más de 120 lanzadores de misiles tierra-tierra, dos aviones F-14 y 10 centros de mando de la Fuerza Quds de Irán. También se informó de la muerte de altos mandos del IRGC, incluido el general Ali Shadmani.  

Israel emitió advertencias para que los civiles huyeran de áreas como la Ciudad Industrial de Rasht y el centro de Teherán, afectando hasta 330.000 personas en zonas que albergan la televisión estatal y la sede de la policía. Estas advertencias fueron amplificadas por funcionarios estadounidenses. Posteriormente, Israel amplió sus objetivos para incluir «objetivos del régimen y organismos de represión gubernamental en el corazón de Teherán», como la notoria prisión de Evin, la sede de las fuerzas paramilitares Basij e incluso un reloj simbólico en la Plaza Palestina. Aunque los funcionarios israelíes insistieron en que no buscaban el derrocamiento del régimen, Netanyahu insinuó esta posibilidad.  

Respuesta de Irán: Lanzamiento de Misiles y Drones

Irán respondió lanzando cientos de misiles y drones contra Israel. Las estimaciones del ejército israelí cifran los números en 450 misiles y 1.000 drones. La mayoría fueron interceptados por las defensas aéreas de Israel, pero algunos lograron penetrar. Los cohetes y la metralla iraníes impactaron al menos 10 lugares en Israel. Los objetivos incluyeron Haifa (hiriendo a 31 personas), Tel Aviv (Ramat Aviv, Bat Yam), el Aeropuerto Internacional Ben Gurion, instalaciones de investigación y Ashdod. También se escucharon explosiones en Jerusalén.  

El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC) desplegó su avanzado misil Kheibar Shekan (también conocido como Khorramshahr-4), considerado el misil con la carga útil más pesada del arsenal balístico de Irán. Irán también disparó docenas de drones unidireccionales con ojivas explosivas anti-fortificación. Sin embargo, los lanzamientos de misiles balísticos iraníes disminuyeron significativamente para el 23 de junio en comparación con el inicio del conflicto , posiblemente debido a que Israel apuntó a los lanzadores o a que Irán conservó armamento.  

Intervención Militar Directa de Estados Unidos: «Operation Midnight Hammer» y sus Consecuencias

Tras una semana de ataques israelíes, Estados Unidos intervino directamente el 22 de junio de 2025, con «ataques masivos de precisión» (denominados «Operación Martillo de Medianoche») contra tres sitios nucleares iraníes clave: Fordow, Natanz e Isfahán. Estos ataques utilizaron bombas antibúnker de 30.000 libras entregadas por bombarderos furtivos, una capacidad exclusiva de Estados Unidos. Israel había despejado las defensas aéreas iraníes en las 48 horas previas a los ataques estadounidenses.  

Las evaluaciones iniciales indicaron «daños y destrucción extremadamente graves» en los tres sitios nucleares. El jefe del OIEA esperaba «daños muy significativos» en Fordow. Irán confirmó los ataques, pero insistió en que su programa nuclear no se detendría, afirmando que no había contaminación radiactiva. El presidente Trump describió los ataques como un «éxito militar espectacular» y exigió a Irán que «hiciera la paz». El secretario de Defensa Pete Hegseth declaró que la misión «no tenía como objetivo el cambio de régimen» , aunque Trump posteriormente insinuó esta posibilidad.  

La reacción de Irán a la intervención de Estados Unidos fue de condena. El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araghchi, declaró que Estados Unidos había cruzado «una línea roja muy grande» al atacar instalaciones nucleares y prometió «respuestas lamentables», advirtiendo que «las manos de los combatientes del Islam dentro de las fuerzas armadas han sido liberadas para tomar cualquier acción contra sus intereses y militares».  

Bajas y Daños Reportados en Ambos Países

El conflicto ha causado un número significativo de bajas y daños en ambos países. En Irán, el grupo Human Rights Activists, con sede en Washington, informó de al menos 657 muertos y 2.037 heridos hasta el 21 de junio, incluyendo 263 civiles y 164 miembros de las fuerzas de seguridad. Otros informes citaron 224 muertos y más de 400 muertos hasta el 23 de junio, en su mayoría civiles. Los ataques israelíes alcanzaron zonas residenciales.  

En Israel, al menos 24 personas han muerto y cientos han resultado heridas. Los ataques iraníes hirieron a 27 personas y a más de 80 personas en total. El incidente más mortífero resultó en 8 muertes, incluidos 3 niños, en Bat Yam. Los servicios de emergencia israelíes informaron de impactos en 10 lugares.  

La intervención de Estados Unidos, aunque enmarcada como un ataque específico contra instalaciones nucleares, parece haber envalentonado a Israel para expandir su estrategia de objetivos, incluyendo sitios simbólicos y vinculados al régimen dentro de Irán. Esto sugiere un cambio de objetivos puramente militares a un objetivo más complejo de desestabilización interna. El éxito de los ataques estadounidenses, que degradaron gravemente los activos más sensibles y estratégicamente vitales de Irán (su programa nuclear), probablemente proporcionó a Israel una ventaja táctica y estratégica significativa. Esta reducción percibida en la capacidad de Irán para una contra-respuesta devastadora pudo haber dado a Israel la confianza y la libertad operativa para ampliar sus objetivos más allá de los sitios puramente militares o nucleares, hacia aquellos con vínculos directos con la autoridad doméstica y los símbolos del régimen iraní.

A continuación, se presenta una cronología de los eventos clave y un resumen de las bajas y daños reportados:

Tabla 1: Cronología de Eventos Clave (Junio 2025)

Fecha (Junio 2025)Actor PrincipalEvento ClaveUbicación ImpactadaFuente
13IsraelInicio de «Operación León Ascendente», ataques aéreos y con drones contra infraestructura nuclear y militar iraní, y liderazgo militar.Múltiples provincias de Irán (Alborz, Azerbaiyán Oriental, Esfahán, Fars, Kermanshah, Hamedan, Lorestán, Ilam, Markazi, Qom, Teherán, Azerbaiyán Occidental y Jorasán Razavi)  apnews.com
amnesty.org
15IránAtaques con misiles y drones contra Israel.Bat Yam (8 muertos, 3 niños), Tel Aviv, Tamra, Petah Tikva, Bnei Brak, Haifa, Herzliya  amnesty.org  
16IsraelAdvertencia de evacuación para 330.000 personas en Teherán (áreas con TV estatal, policía, hospitales).Centro de Teherán  apnews.com  
17IsraelAtaques aéreos intensificados en Teherán; Israel afirma haber matado al Gen. Ali Shadmani.Teherán, cerca del Aeropuerto Internacional de Mehrabad  apnews.com  
18IránEl Líder Supremo Jamenei rechaza la rendición; Irán reporta ciberataque israelí a TV estatal.Irán  apnews.com  
19Reino Unido, EE. UU.El Secretario de Asuntos Exteriores británico David Lammy se reúne con Marco Rubio y Steve Witkoff; situación «peligrosa».Casa Blanca, EE. UU.  apnews.com  
19Irán, UEEl Ministro de Asuntos Exteriores iraní Abbas Araghchi se reúne con diplomáticos europeos.Ginebra, Suiza  apnews.com  
19IsraelAdvertencia de evacuación para Rasht antes de los ataques.Rasht, Irán  apnews.com  
19China, RusiaXi Jinping y Vladimir Putin discuten la crisis, condenan la agresión israelí y ofrecen mediación.Conversación telefónica  socialistchina.org  
20IránAtaques aéreos israelíes alcanzan la ciudad de Rasht.Rasht, Mar Caspio  apnews.com  
20OIEARafael Grossi advierte al Consejo de Seguridad de la ONU sobre los riesgos de ataques a reactores nucleares iraníes.Sede de la ONU  apnews.com  
21EE. UU.Trump anuncia que decidirá en dos semanas si interviene militarmente.EE. UU.  cbsnews.com  
22EE. UU.«Operación Martillo de Medianoche»: EE. UU. lanza ataques aéreos masivos contra sitios nucleares iraníes (Fordow, Natanz, Isfahán).Irán  pbs.org
apnews.com  
22IránEl Ministro de Asuntos Exteriores Araghchi afirma que EE. UU. cruzó una «línea roja muy grande».Estambul, Turquía  aljazeera.com
pbs.org  
22IsraelNetanyahu felicita a Trump por su «decisión audaz».Israel  aljazeera.com  
22IránLanzamiento de 40 misiles contra Israel; despliegue del misil Kheibar Shekan.10 ubicaciones en Israel (Ramat Aviv, Ben Gurion, etc.)  aljazeera.com  
22CSNUSesión de emergencia tras los ataques de EE. UU. a Irán.Sede de la ONU  aljazeera.com  
23IsraelIsrael expande la guerra a objetivos simbólicos y de régimen (Prisión de Evin, sede Basij, reloj).Teherán  apnews.com
cbsnews.com  
23IránIrán promete represalias por los ataques de EE. UU. y lanza una nueva ola de misiles y drones contra Israel.Israel  aljazeera  
23IsraelAtaques aéreos israelíes en el sur del Líbano (Zrariyeh, Kfrar Milki, Ansar).Líbano  aljazeera.com  

Tabla 2: Bajas y Daños Reportados

PaísTotal de MuertosCiviles MuertosFuerzas de Seguridad MuertasHeridosInfraestructura Clave Impactada (Ejemplos)Fuente
Irán657 (HR Activists, 21 Jun); 224 (Gobierno, 16 Jun); >400 (Salud, 23 Jun)263 (HR Activists); 74 (Gobierno, mujeres y niños)164 (HR Activists)2.037 (HR Activists); 1.800 (Gobierno); 1.277 (Gobierno, 17 Jun)Instalaciones nucleares (Natanz, Isfahán, Arak, Fordow), instalaciones de misiles, centros de mando del IRGC, sede de la Fuerza Quds, TV estatal, Prisión de Evin, sede de Basij, áreas residenciales, aeropuertos  apnews.com
amnesty.org  
Israel2424 (incluyendo mujeres y niños)N/A>500 (total); 600 (16 Jun); 80 (tras ataques EE. UU.); 27 (tras ataques EE. UU.)10 ubicaciones (incluyendo Haifa, Tel Aviv (Ramat Aviv, Bat Yam), Aeropuerto Ben Gurion, Ashdod), instalaciones de investigación, edificios de apartamentos  pbs.org
apnews.com  

Dimensiones Estratégicas Clave

El conflicto actual entre Israel e Irán se desarrolla a través de múltiples dimensiones estratégicas, que van más allá de los enfrentamientos militares convencionales.

El Programa Nuclear Iraní

El programa nuclear de Irán sigue siendo un punto central del conflicto. Los ataques israelíes y, posteriormente, estadounidenses, se dirigieron específicamente a la principal instalación de enriquecimiento de uranio de Irán en Natanz, talleres de centrifugadoras cerca de Teherán, laboratorios en Isfahán y el reactor de agua pesada de Arak. La instalación nuclear de Fordow, enterrada profundamente bajo una montaña, fue un objetivo clave para las bombas antibúnker estadounidenses.  

El jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, advirtió repetidamente contra los ataques a los reactores nucleares de Irán, en particular la central eléctrica comercial de Bushehr, afirmando que un impacto directo resultaría en una «liberación muy alta de radiactividad». Aunque Israel se centró en las instalaciones de enriquecimiento y no en los reactores, Grossi evaluó que los «edificios clave» del reactor de agua pesada de Arak sufrieron daños, aunque no estaba operativo y no representaba riesgo de contaminación. Los ataques a las instalaciones de enriquecimiento como Natanz conllevan riesgos menores, pero aún presentes, de contaminación radiológica.  

Irán sostiene que su programa nuclear tiene fines pacíficos , pero es el único estado no poseedor de armas nucleares que enriquece uranio hasta el 60%. Las agencias de inteligencia estadounidenses han evaluado que Irán no está buscando activamente una bomba, pero Trump y los líderes israelíes afirman que Irán podría ensamblar rápidamente un arma nuclear. Irán afirmó haber retirado material nuclear de los sitios atacados antes de los ataques estadounidenses.  

Guerra Cibernética

El conflicto ha escalado a una «guerra cibernética en toda regla», con ambas naciones desplegando sus arsenales digitales. Lo que comenzó como escaramuzas encubiertas se ha intensificado. Grupos vinculados a Israel, como Predatory Sparrow, se atribuyeron la responsabilidad de ciberataques contra el Bank Sepah y Nobitex (una bolsa de criptomonedas) de Irán, supuestamente drenando 90 millones de dólares y filtrando código fuente. Los ataques digitales también se dirigieron a los medios estatales iraníes, transmitiendo brevemente mensajes antigubernamentales. Israel también interrumpió la distribución de gasolina en Irán mediante un hackeo.  

Irán respondió cortando su internet del mundo exterior, lo que dificultó la obtención de información. Los funcionarios iraníes ordenaron a los altos líderes que dejaran de usar dispositivos conectados a internet para mitigar las incursiones. Los funcionarios de seguridad estadounidenses se están preparando para posibles ciberataques de represalia dirigidos a las redes energéticas, los sistemas de agua y los servicios esenciales de Estados Unidos. El DHS emitió una alerta nacional de terrorismo, advirtiendo sobre probables «ciberataques de bajo nivel» por parte de activistas proiraníes y operaciones más sofisticadas por parte de unidades patrocinadas por el estado. El ciberespacio es una herramienta de la guerra asimétrica de Irán, utilizada para proyectar poder, infundir miedo, sembrar confusión y degradar la moral. Irán también se centra en el ciberespionaje, el seguimiento de movimientos, la interceptación de comunicaciones y la identificación de objetivos. Los expertos coinciden en que Israel mantiene una ventaja tecnológica.  

El Papel de los Proxies Regionales

El conflicto ha puesto de manifiesto lo «agotada» y «gravemente socavada» que está el «Eje de Resistencia» de Irán (Hamás, Hezbolá, Hutíes) después de meses de lucha contra Estados Unidos e Israel. Esto ha «socavado gravemente la capacidad de Irán para disuadir a Israel». Hamás inició la guerra de Gaza el 7 de octubre de 2023 y ha sido gravemente debilitado por Israel. La «campaña del Líbano» de Israel eliminó a Hezbolá, descrito como «el elemento disuasorio más fuerte de Irán contra un ataque israelí». Israel ha llevado a cabo «violaciones casi diarias» de un alto el fuego de noviembre de 2024 con Hezbolá, incluidos intensos ataques aéreos en el sur del Líbano y los suburbios del sur de Beirut. El jefe de Hezbolá, Naim Qassem, advirtió sobre medidas «apropiadas» si el conflicto escala aún más, pero el grupo no ha intervenido militarmente en el conflicto directo entre Israel e Irán hasta ahora.  

Los Hutíes han continuado los ataques con misiles contra Israel en oposición a la guerra de Gaza. Se comprometieron a reanudar los ataques contra los buques estadounidenses en el Mar Rojo si la administración Trump se unía a la campaña militar de Israel, habiendo pausado dichos ataques en mayo bajo un acuerdo con Estados Unidos. Sus ataques de largo alcance enfrentan desafíos debido a la distancia y las defensas israelíes. Las milicias iraquíes tuvieron «aún menos éxito» que los Hutíes en atacar a Israel, sin que ninguno de sus ataques tuviera un impacto significativo. Muchos condicionaron su entrada en la guerra a la intervención estadounidense. La campaña aérea israelí contra Irán ha «puesto de manifiesto lo gravemente que la acción israelí después del 7 de octubre desbarató la red de poder y socios de Irán». A Irán le llevará años recuperar su destreza regional.  

La observada «silencio ensordecedor» o la respuesta limitada de la red de poder de Irán durante el conflicto directo no es simplemente una observación pasiva, sino un indicador crítico de la efectividad de las campañas preventivas y sostenidas de Israel contra estos grupos. Esto sugiere una estrategia deliberada por parte de Israel para desmantelar la disuasión asimétrica de Irán, forzando así a Irán a una confrontación militar directa menos ventajosa. Las campañas militares israelíes previas y en curso en Gaza y el Líbano (y los ataques estadounidenses contra los Hutíes) no fueron solo conflictos aislados, sino que sirvieron a un propósito estratégico en la dinámica más amplia entre Irán e Israel. Al debilitar sistemáticamente las fuerzas de poder más potentes de Irán, Israel efectivamente «despejó el campo de batalla» de las principales opciones de respuesta asimétrica de Irán, reduciendo así el riesgo de una guerra de poder regional generalizada en respuesta a los ataques directos contra Irán. Esto permitió a Israel escalar directamente contra Irán con un riesgo percibido menor de una abrumadora represalia por parte de los grupos de poder. Esto implica un cambio estratégico en el enfoque de Israel hacia Irán. En lugar de simplemente contener a los grupos de poder, Israel ha buscado activamente degradar las capacidades generales de proyección de poder regional de Irán para crear las condiciones para ataques directos y decisivos contra el territorio iraní, particularmente su programa nuclear. Esto redefine el concepto de disuasión en la región, pasando de disuadir a Irán a través de sus grupos de poder a disuadir directamente a Irán demostrando una superioridad convencional y cibernética abrumadora contra sus activos y liderazgo centrales.  

Dinámicas Políticas Internas y Liderazgo

Las dinámicas políticas internas en Irán e Israel, junto con las posturas de sus respectivos liderazgos, son fundamentales para comprender la evolución y las posibles trayectorias del conflicto.

Postura del Liderazgo Iraní y Consideraciones de Sucesión

El Líder Supremo de Irán, el Ayatolá Ali Jamenei, ha rechazado firmemente los llamados de Estados Unidos a la rendición, declarando que «la nación iraní no es de las que se rinden» y advirtiendo que cualquier participación militar estadounidense resultaría en «daños irreparables». Los líderes militares iraníes han prometido más ataques contra Israel, afirmando que las operaciones anteriores tenían «únicamente el propósito de advertencia y disuasión». El portavoz interino de Irán para los ataques de represalia, Ebrahim Zolfaghari, advirtió: «Jugador Trump, usted puede comenzar esta guerra, pero nosotros seremos quienes la terminen».  

El conflicto ha acelerado la planificación de la sucesión de Jamenei, con un comité de tres miembros de un alto organismo clerical intensificando su trabajo. Se están considerando candidatos como Mojtaba Jamenei (línea dura) y Hassan Jomeini (más conciliador), lo que refleja los debates internos sobre la dirección futura. Los ataques israelíes han matado a varios altos mandos del IRGC y han atacado el «tejido conectivo» entre Teherán y las provincias, lo que podría erosionar la cohesión interna del régimen. El gobierno iraní también ordenó a los altos líderes que dejaran de usar dispositivos conectados a internet debido a los ciberataques.  

Estrategia y Objetivos del Primer Ministro Israelí Netanyahu

El primer ministro Benjamin Netanyahu ha declarado que los objetivos duales de Israel son eliminar la amenaza nuclear iraní y derrotar a Hamás. Afirmó que Israel «no será arrastrado a una guerra de desgaste» y tiene como objetivo poner fin a la guerra una vez que se completen los objetivos. Netanyahu enmarcó la etapa actual como un «cambio dramático», desmantelando proactivamente las capacidades militares de Irán y «llevando la guerra a territorio iraní», con pilotos israelíes operando «en los cielos iraníes como si fueran nuestros».  

Aunque los funcionarios estadounidenses declararon que sus ataques no tenían como objetivo el cambio de régimen, Netanyahu y sus asesores han insinuado esperanzas de un levantamiento en Irán. El objetivo declarado de Netanyahu es «degradar, destruir y eliminar» la capacidad de Irán para militarizar su programa nuclear. Las tácticas de Israel, que incluyen la colocación de coches bomba, el ataque a edificios de medios estatales, la emisión de órdenes de evacuación imposibles en áreas civiles densamente pobladas y el impacto en bloques residenciales, han sido criticadas por Amnistía Internacional por demostrar un «desprecio total por el derecho internacional humanitario y los derechos humanos» y por parecer diseñadas para «sembrar el miedo entre los civiles iraníes». Los críticos argumentan que estas tácticas apuntan a un objetivo de «fracaso estatal» en lugar de una transición democrática.  

El ataque explícito de Israel a sitios simbólicos y vinculados al régimen , junto con las insinuaciones de Netanyahu sobre un cambio de régimen , sugiere una intención estratégica por parte de Israel de explotar las fragilidades internas iraníes y potencialmente desencadenar una crisis interna, en lugar de centrarse únicamente en las capacidades militares. Esto indica un objetivo a largo plazo más profundo y arriesgado, que va más allá de las preocupaciones de seguridad inmediatas. Al atacar símbolos de la autoridad estatal, las fuerzas de seguridad internas y la moral civil, Israel parece estar persiguiendo una estrategia de erosión interna o desintegración estatal dentro de Irán. El objetivo podría no ser un derrocamiento inmediato y directo del régimen (que es complejo y difícil de predecir ), sino más bien crear fracturas internas y caos tan profundos que la estabilidad del régimen existente se vea gravemente comprometida, lo que podría conducir a un estado «semifuncional» y menos amenazante. Esto representa una estrategia calculada para inducir inestabilidad interna como medio de seguridad a largo plazo, potencialmente a expensas de una mayor imprevisibilidad regional.  

Reacciones y Esfuerzos Diplomáticos Internacionales

La escalada del conflicto entre Israel e Irán ha provocado una gama diversa de reacciones internacionales, con esfuerzos diplomáticos que a menudo se ven obstaculizados por profundas divisiones geopolíticas.

Posición de Estados Unidos y sus Advertencias

Estados Unidos intervino directamente el 22 de junio de 2025, con ataques a sitios nucleares iraníes. El presidente Trump describió los ataques como un «éxito militar espectacular» y fue elogiado por los líderes israelíes. Aunque el secretario de Defensa Hegseth declaró que la misión «no tenía como objetivo el cambio de régimen» , Trump posteriormente cuestionó: «¿Si el actual Régimen iraní no puede HACER A IRÁN GRANDE DE NUEVO, por qué no habría un cambio de Régimen?». El secretario de Estado Marco Rubio también insinuó la vulnerabilidad de Irán si no buscaba la paz. Trump advirtió de ataques adicionales si Teherán tomaba represalias contra las fuerzas estadounidenses. Estados Unidos reposicionó aeronaves militares y buques de guerra en la región. Los intentos estadounidenses de negociaciones directas con Irán para frenar su programa nuclear no tuvieron éxito. El ministro de Asuntos Exteriores de Irán acusó a Estados Unidos de «hacer estallar» los esfuerzos diplomáticos.  

Respuestas de la Unión Europea y Llamados a la Desescalada

Los diplomáticos europeos, incluido el secretario de Asuntos Exteriores británico David Lammy, expresaron que la situación en Oriente Medio «sigue siendo peligrosa». Los líderes del G7, junto con Canadá y la UE, pidieron una desescalada, reiterando un firme compromiso con la paz y la estabilidad y el derecho de Israel a defenderse. Mantuvieron una postura consistente de que «Irán nunca puede tener un arma nuclear» y que una solución diplomática sigue siendo la mejor manera de abordar las preocupaciones nucleares. Los ministros europeos se reunieron con el principal diplomático de Irán en Ginebra, expresando su voluntad de continuar las discusiones. El ministro de Asuntos Exteriores de Irán criticó a los diplomáticos europeos por instar a Irán a «volver a la mesa» cuando, según él, Irán nunca la abandonó.  

Posturas de Rusia y China y sus Iniciativas Diplomáticas

Rusia y China condenaron enérgicamente los ataques de Estados Unidos a los sitios nucleares de Irán, calificándolos de «irresponsables» y de «violación del derecho internacional». Ambas naciones pidieron un alto el fuego inmediato, diálogo y negociación como el camino fundamental a seguir. El presidente ruso Vladimir Putin ofreció mediar para poner fin al conflicto, compartiendo propuestas con Irán, Israel y Estados Unidos. El presidente chino Xi Jinping apoyó los esfuerzos de mediación de Rusia. China enfatizó la promoción de un alto el fuego, la garantía de la seguridad de los civiles y el estricto cumplimiento del derecho internacional, afirmando que el uso indiscriminado de la fuerza es inaceptable. Rusia mantiene una «relación de confianza» con Irán, habiendo ayudado a construir su central nuclear en Bushehr y teniendo trabajadores rusos allí. El ministro de Asuntos Exteriores de Irán buscó «consultas serias» con Rusia.  

Reacciones de los Estados del Golfo y la Organización de Cooperación Islámica (OCI)

Los estados del Golfo, que albergan múltiples bases militares estadounidenses, están en alerta máxima debido a la posibilidad de una guerra más amplia. Les preocupan los ataques a las instalaciones energéticas y el posible cierre del Estrecho de Ormuz. Bahréin indicó al 70% de los empleados gubernamentales que trabajaran desde casa. Las tensiones preexistentes con Irán no deben interpretarse como una condonación de los estados del Golfo a los ataques israelíes, que se consideran «actos de agresión no provocados que descarrilaron las conversaciones nucleares facilitadas por Omán». Los árabes del Golfo buscarán «navegar por un camino delicado entre Estados Unidos e Irán», con el objetivo de minimizar los efectos colaterales. Mediadores tradicionales como Omán y Qatar están redoblando sus esfuerzos para desescalar las tensiones. Los ministros de Asuntos Exteriores árabes celebraron una reunión de emergencia en Estambul para discutir las repercusiones regionales. La OCI pidió una mayor solidaridad entre las naciones islámicas para contrarrestar las acciones israelíes.  

Intervención del Consejo de Seguridad de la ONU y la OIEA

El Consejo de Seguridad de la ONU (CSNU) convocó una sesión de emergencia tras los ataques liderados por Estados Unidos. El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, advirtió que la región estaba «al borde de una espiral descendente mortal» y pidió un cese inmediato de las hostilidades y un retorno a las negociaciones. Afirmó que «no hay solución militar. El único camino a seguir es la diplomacia». Rusia, China y Pakistán propusieron una resolución que exigía un «alto el fuego inmediato e incondicional» y condenaba los ataques a las instalaciones nucleares iraníes, pero esto fue considerado un «punto muerto» debido al probable veto de Estados Unidos. La Junta de Gobernadores del OIEA aprobó una resolución que declaraba que Irán no cumplía con sus compromisos de salvaguardias nucleares el día antes del ataque inicial de Israel. El jefe del OIEA, Grossi, advirtió contra el ataque a los reactores nucleares.  

La marcada división dentro del Consejo de Seguridad de la ONU , con Rusia y China condenando las acciones de Estados Unidos e Israel y Estados Unidos vetando efectivamente cualquier censura contra sí mismo, pone de manifiesto una polarización geopolítica fundamental que está obstaculizando gravemente la gestión eficaz de la crisis multilateral. Esta parálisis neutraliza efectivamente al principal organismo internacional para el mantenimiento de la paz y la seguridad. Esto impacta directamente la trayectoria del conflicto al eliminar una vía crítica para la presión externa, la mediación o la aplicación de un alto el fuego. Implica que el conflicto seguirá siendo impulsado por los cálculos militares y políticos de los beligerantes directos y sus aliados inmediatos, en lugar de por una respuesta internacional unificada. Esta situación ilustra el conflicto como un microcosmos de fallas más amplias en la gobernanza global, donde la rivalidad entre grandes potencias prevalece sobre los mecanismos de seguridad colectiva.  

Impacto Geopolítico y Económico Global

El conflicto entre Israel e Irán conlleva riesgos significativos de desestabilización regional y tiene implicaciones directas para los mercados energéticos globales y las condiciones humanitarias.

Riesgos de Desestabilización Regional y Expansión del Conflicto

La situación en Oriente Medio «sigue siendo peligrosa» , con un «riesgo creciente de que este conflicto pueda salirse rápidamente de control». Existe la posibilidad de que se descienda a un «agujero de represalias tras represalias». Una guerra prolongada conlleva altos riesgos: muertes y desplazamientos generalizados, espiral de violencia, incluido el terrorismo y conflictos secundarios. Las apuestas del conflicto son «enormes, incluso existenciales» para los vecinos inmediatos de Irán. Las amenazas a la producción y el transporte de petróleo y gas socavarían sus economías. Si el conflicto persiste o Irán se desestabiliza aún más, los flujos de refugiados iraníes podrían poner en peligro la estabilidad interna en los países árabes del Golfo y otros países árabes. Turquía también está en alerta ante una posible afluencia de refugiados. Un conflicto abierto «trastocaría la visión estratégica del Golfo para Oriente Medio», que depende de la desescalada, las economías diversificadas y la construcción de lazos económicos en toda la región.  

Implicaciones para los Mercados Energéticos Globales (Estrecho de Ormuz, Precios del Petróleo)

El conflicto ha suscitado preocupaciones sobre el intento de Irán de cerrar el Estrecho de Ormuz, el punto de estrangulamiento petrolero más importante del mundo, por el que pasa aproximadamente el 20% de las necesidades diarias de petróleo del mundo. La mayor parte de este petróleo se dirige a Asia. Si el estrecho se bloqueara, los precios del petróleo podrían dispararse temporalmente hasta 120-130 dólares por barril , o incluso superar los 90 dólares por barril si los 1,1 millones de barriles diarios de Irán se retiraran del mercado. Esto causaría un shock inflacionario en la economía global.  

Los analistas creen que Irán tiene buenas razones para no bloquear el estrecho, ya que cortaría sus propias exportaciones de petróleo (principalmente a China), perjudicaría a sus vecinos árabes y probablemente provocaría una rápida intervención militar estadounidense que destruiría la armada de Irán en horas o días. Si bien los precios del petróleo inicialmente subieron (del 4% al 8%) después de los ataques estadounidenses, se estabilizaron rápidamente o incluso cayeron, lo que refleja las esperanzas de una represalia limitada y la creencia de que el estrecho no se cerraría. Los precios más altos del petróleo conducirían a un aumento de los costos de los bienes, lo que podría impedir que la Reserva Federal baje las tasas de interés. Los mercados financieros han mostrado volatilidad, con los inversores cambiando a activos más seguros.  

La rápida estabilización de los precios del petróleo después de los picos iniciales sugiere que los mercados globales están descontando el peor escenario de un cierre total del Estrecho de Ormuz. Esto implica una confianza subyacente en la capacidad de las principales potencias (particularmente Estados Unidos) para asegurar el flujo de petróleo, o una evaluación racional de que el propio interés de Irán (sus propias exportaciones de petróleo) evitará una medida tan drástica. El rápido repunte del mercado tras el shock inicial indica que los inversores y comerciantes no están valorando una interrupción prolongada o completa de los flujos de petróleo a través del Estrecho de Ormuz. Esto sugiere una creencia colectiva de que Irán se autodisuadirá de tal movimiento debido a sus propios intereses económicos, o que Estados Unidos (y potencialmente otros actores internacionales) posee la capacidad militar inmediata y la voluntad política para mantener la vía fluvial abierta, limitando así la duración y la gravedad de cualquier shock de suministro. Este comportamiento del mercado refleja una restricción percibida en la escalada iraní en la esfera económica, incluso en medio de un intenso conflicto militar. Sugiere que, si bien Irán podría participar en interrupciones simbólicas o limitadas, la militarización económica a gran escala del Estrecho de Ormuz se considera poco probable por parte de los principales actores financieros, lo que limita uno de los efectos dominó globales más temidos del conflicto.  

A continuación, se presenta una tabla que detalla el impacto en los mercados energéticos:

Tabla 3: Impacto en los Mercados Energéticos (Junio 2025)

IndicadorPrecio Pre-Conflicto (aprox. 12 Jun)Precio Pico Post-Intervención (23 Jun)Precio Actual (23 Jun)Cambio Porcentual (Pico vs. Pre-Conflicto)Volumen de Petróleo (Estrecho de Ormuz)Comentarios/ProyeccionesFuente
Crudo WTI~$68/bbl  ~$77.13/bbl  ~$73.64/bbl  ~+13.4% (Pico)~20 millones bpd (~20% del consumo mundial)  Volatilidad alta; riesgo de $80-$85/bbl si hay interrupción en Ormuz; soporte en $67, resistencia en $81  livemint.com
apnews.com  
Crudo BrentN/A~$78.50/bbl  ~$71.50/bbl  ~+8% (Pico)N/AEl mercado descuenta cierre total; Irán tiene razones para no bloquear; EE. UU. probablemente intervendría  newarab.com
apnews.com  
MCX Crude Oil Futures (India)N/A~₹6,550/bbl  ~₹6,448/bbl  ~+0.69% (Actual)N/ASesgo alcista; soporte en ₹6,100, resistencia en ₹6,600  livemint.com  

Consecuencias Humanitarias y Flujos de Refugiados

El conflicto ha provocado importantes bajas civiles tanto en Irán como en Israel. La crisis humanitaria existente en Gaza, donde Israel ha bloqueado las entregas de combustible durante 16 semanas, ha empeorado, con tasas alarmantes de desnutrición aguda entre los niños. La inestabilidad y la escasez de combustible limitan las operaciones de ayuda. UNICEF y otros funcionarios humanitarios de la ONU instan a Israel a permitir entregas de ayuda a gran escala a través de todos los pasos fronterizos.  

Escenarios Futuros y Perspectivas

El conflicto entre Israel e Irán es una situación altamente fluida con varias posibles trayectorias geopolíticas, cada una con implicaciones significativas a largo plazo.

Análisis de Posibles Trayectorias del Conflicto

Se han delineado cuatro escenarios potenciales para la evolución de este conflicto:

  1. Confrontación Controlada (Alta Probabilidad): En este escenario, ambas partes continúan intercambiando ataques sin la participación directa de otras potencias externas. La intensidad podría disminuir cuando Israel considere que ha infligido suficiente daño, pero los intercambios ocasionales podrían persistir. Las preocupaciones sobre la reconstitución del programa nuclear de Irán seguirían siendo altas. El impacto del conflicto se mantendría restringido a los activos regionales, pero existirían riesgos de daños colaterales a las instalaciones petroleras en la región u otros objetivos.  
  2. Conflicto Ampliado con Involucramiento de EE. UU. (Probabilidad Media): Aunque Estados Unidos ya ha intervenido, un conflicto más amplio implicaría que los activos militares estadounidenses en la región fueran atacados directamente o que los suministros de energía se vieran gravemente amenazados, lo que conduciría a un final más amplio, potencialmente decisivo, pero no garantizado.  
  3. Irán Retrocede y Busca Negociaciones Nucleares (Baja Probabilidad): Irán podría acordar un alto el fuego para las conversaciones nucleares con el fin de obtener un respiro, pero Israel tiene pocos incentivos para aceptar un acuerdo que no implique que Irán renuncie a sus capacidades nucleares y misiles balísticos, lo que Irán consideraría una rendición.  
  4. Colapso del Régimen Iraní (Baja Probabilidad): Aunque es difícil de predecir, a este resultado se le asigna actualmente una baja probabilidad. Sin embargo, los continuos ataques israelíes que eliminan a comandantes y degradan las redes internas podrían erosionar la cohesión del régimen.  

Implicaciones a Largo Plazo para la Seguridad Regional y Global

Una guerra prolongada conlleva riesgos de muertes generalizadas, desplazamientos, espiral de violencia, terrorismo y conflictos secundarios. La estrategia declarada de Israel de «degradar, destruir y eliminar» , junto con la evaluación de que esto podría conducir a un «estado iraní semifuncional» o un «fracaso estatal» , revela un riesgo paradójico a largo plazo. Si bien el objetivo es neutralizar una amenaza, este enfoque podría crear inadvertidamente una entidad más caótica e impredecible en Irán, lo que podría exacerbar la inestabilidad regional en lugar de resolverla. El éxito militar en la degradación de las capacidades de Irán y la posible erosión de su cohesión estatal podría no conducir a un entorno regional más seguro o estable. En cambio, al debilitar la autoridad central sin una alternativa viable, se corre el riesgo de transformar a un adversario estructurado, aunque hostil, en una fuente fragmentada e impredecible de caos.  

Cualquiera que sea el futuro inmediato, la destreza regional de Irán, particularmente su red de poder, ha sido gravemente socavada, y le llevará años recuperarse. El conflicto trastoca la visión estratégica del Golfo para la estabilidad y las economías diversificadas. Los árabes del Golfo buscarán navegar por un camino delicado para minimizar los efectos colaterales. El conflicto puede reforzar una alianza informal entre Israel y los estados árabes contra Irán. Es probable que el conflicto conduzca a una persistente inestabilidad económica y falta de seguridad, con el potencial de crisis de refugiados a gran escala.  

Esta situación pone de manifiesto la tensión inherente entre los objetivos militares a corto plazo y la estabilidad estratégica a largo plazo. Sugiere que, sin una estrategia diplomática y política paralela y sólida para gestionar un Irán post-conflicto o desestabilizado, el «éxito» militar podría inadvertidamente sembrar una «cosecha de caos» , creando desafíos de seguridad más complejos y difusos para todos los actores de la región.  

Conclusión

La evolución de la guerra entre Israel e Irán en junio de 2025 marca una escalada sin precedentes, transformando una prolongada guerra de poder en una confrontación militar directa. La decisión de Israel de lanzar ataques a gran escala contra la infraestructura nuclear y militar iraní, motivada en parte por el debilitamiento de las redes de poder de Irán, ha sido respondida con misiles y drones iraníes. La intervención directa de Estados Unidos, que atacó sitios nucleares clave en Irán, ha añadido una capa de complejidad y riesgo, aunque también ha sido interpretada como un factor que permitió a Israel ampliar sus objetivos a elementos simbólicos y relacionados con el régimen.

Las dimensiones estratégicas del conflicto son multifacéticas. El programa nuclear de Irán sigue siendo un objetivo principal, con advertencias del OIEA sobre los riesgos de contaminación. La guerra cibernética ha emergido como un frente activo, con ataques y contramedidas de ambos lados. La red de poder de Irán ha demostrado estar significativamente debilitada, lo que limita su capacidad de respuesta asimétrica y refleja la efectividad de las campañas israelíes previas.

A nivel político, el liderazgo iraní se mantiene desafiante, pero la intensidad del conflicto ha acelerado las deliberaciones sobre la sucesión del Líder Supremo. La estrategia de Netanyahu es agresiva, buscando desmantelar las capacidades de Irán y, potencialmente, desestabilizar el régimen, aunque esto conlleva el riesgo de crear un estado iraní más caótico e impredecible a largo plazo.

Las reacciones internacionales están profundamente polarizadas. Mientras Estados Unidos y sus aliados apoyan las acciones militares, Rusia y China condenan la intervención estadounidense y abogan por la diplomacia, lo que ha paralizado la capacidad del Consejo de Seguridad de la ONU para actuar de manera decisiva. Los estados del Golfo se encuentran en una posición precaria, buscando minimizar los efectos colaterales de un conflicto que amenaza su propia estabilidad y economías.

El impacto geopolítico y económico global es considerable. Existe un alto riesgo de desestabilización regional, incluyendo posibles flujos de refugiados y la interrupción de las economías vecinas. Aunque el Estrecho de Ormuz sigue siendo un punto de estrangulamiento crítico para el petróleo mundial, los mercados energéticos han mostrado una sorprendente resiliencia, lo que sugiere una evaluación de que Irán no lo cerrará por completo, o que cualquier interrupción sería de corta duración debido a la intervención internacional.

En síntesis, la guerra entre Israel e Irán es un conflicto de alta intensidad con ramificaciones de gran alcance. Su evolución futura es incierta, con escenarios que van desde una confrontación prolongada pero controlada hasta una expansión regional más peligrosa. La interconexión de las dimensiones militares, nucleares, cibernéticas y políticas internas, junto con la complejidad de las relaciones internacionales, subraya la necesidad de una vigilancia continua y respuestas políticas matizadas para navegar esta crisis en desarrollo.